
«Nuestras fuerzas destruyeron por completo a los combatientes y el material del enemigo, y se apoderaron de grandes cantidades de equipos y armas», aseguró Nabil Abdalá, portavoz del Ejército de Sudán.
El ejército «seguirá avanzando en todos los frentes hasta que la victoria sea completa y cada centímetro de nuestro país esté purgado de la milicia y sus partidarios», agregó Abdalá.
Poco antes, una fuente militar había dicho a la agencia de noticias AFP que las tropas «asaltaron el palacio y tomaron su control después de haber aplastado los restos de la milicia».
El palacio presidencial en Jartum, la capital de Sudán, estaba ocupado por la facción paramilitar desde el inicio del conflicto. Tras la conquista del recinto, las FAR tomaron rápidamente el control de las calles de Jartum, lo que obligó al gobierno alineado con el ejército a huir a Puerto Sudán, en la orilla del mar Rojo.
Al comienzo de la semana, el Ejército indicó que había hecho converger sus fuerzas provenientes del sur con las que estaban en el centro de la capital, aumentando la presión sobre las FAR.
La guerra causó decenas de miles de muertos y el desplazamiento de 12 millones de personas, provocando la mayor crisis alimentaria y de desplazamiento en el mundo.
En el Gran Jartum, al menos 3,5 millones de personas tuvieron que abandonar sus hogares como consecuencia de la violencia, y al menos 100.000 personas se enfrentan a la desnutrición, según datos de la ONU.
RML (AFP, DPA, Reuters)