
Un nuevo video ha brindado una luz sobre nuestra relación emocional con los teléfonos inteligentes, revelando cuán profundamente conectados estamos con nuestros dispositivos.
Los participantes en el video se sometieron a una «prueba de conexión», diseñada para medir sus respuestas emocionales a las posesiones apreciadas, incluidos sus teléfonos inteligentes.
Los resultados mostraron que muchas personas valoran sus dispositivos móviles tanto como sus pertenencias personales más atesoradas.
La prueba se alineó con una encuesta reciente realizada por Squaretrade, que descubrió que ocho de cada diez personas se sienten emocionalmente apegadas a sus teléfonos, y casi la mitad admitió que «no podrían funcionar» en sus vidas cotidianas sin ellos.
Debido a esta dependencia de sus dispositivos, los usuarios de teléfonos inteligentes ingresan regularmente al «modo de pánico» después de menos de una hora sin él.
«Nuestros teléfonos son más que solo dispositivos: son nuestras líneas de vida, que tienen recuerdos, finanzas y conexiones personales», dijo Kevin Gillan, director gerente europeo de SquareTrade.
Además de mantenernos conectados, el 34% de los usuarios de teléfonos inteligentes confían en sus Pohnes para sus aplicaciones bancarias y financieras y el 11% depende de sus dispositivos para organizar sus horarios, administrando calendarios y diarios.
Pero lo más importante, el 44% de los usuarios enfatizaron que preservar fotos y recuerdos en sus dispositivos era más importante que usarlo para comunicarse.
A pesar de este apego a nuestros dispositivos, Kevin señaló que la investigación también mostró una gran brecha en la protección, dejando a millones vulnerables a la pérdida, robo o daño.
Un tercio teme que se robe su dispositivo, pero solo solo el 20% de los propietarios de teléfonos dicen que tienen seguro, y casi la mitad tenían dudas de que pueden recuperar sus datos si su teléfono se pierde o roba.
Preocupantemente, uno de cada cinco (22%) no está seguro de a quién contactar, y el 43% encuentra pólizas de seguro demasiado confusas y no saben cuáles deberían tener.
Kevin Gillan, de Squaretrade, agregó: “Los teléfonos inteligentes son esenciales para nuestra vida cotidiana, pero esta dependencia también los convierte en objetivos principales para el robo y la pérdida, interrumpiendo todo, desde el trabajo hasta la seguridad personal.
«Para abordar los desafíos futuros, necesitamos soluciones de seguro integradas y asequibles que combinen la recuperación de hardware con protección de datos avanzada. No se trata solo de reemplazar un teléfono, sino que se trata de proporcionar tranquilidad en nuestro mundo conectado digitalmente».