En mensaje a Rusia, legisladores chilenos se reúnen en la Antártida para subrayar reclamos territoriales

Funcionarios de defensa de Chile convocaron una reunión en el fondo del planeta el jueves en un intento por reforzar sus reclamos territoriales en la Antártida mientras aumentan las tensiones por las maniobras de Rusia en la región polar.

Los legisladores del comité de defensa parlamentario de Chile volaron a una desolada base aérea para una reunión anunciada como una afirmación de la soberanía nacional.

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“Vamos a estar sentados en la Antártida en un acto de soberanía, de salvaguarda y apoyo a nuestra integridad nacional frente a cualquier amenaza”, dijo Camila Flores, miembro del comité, señalando a Rusia como una amenaza de ese tipo.

Pingüinos papúa sobre rocas cerca de la estación chilena Bernardo O’Higgins, Antártida, 22 de enero de 2015. Miembros del Comité de Defensa de Chile se reunieron el jueves 23 de mayo de 2024 en una sesión informativa especial en la Antártida para abordar “las condiciones geopolíticas prevalecientes “. (Foto AP/Natacha Pisarenko)

Los legisladores revelaron poco sobre sus conversaciones en la base llena de glaciares más allá de decir que abordaron “las condiciones geopolíticas prevalecientes” en el continente blanco que tiene vastos recursos minerales, reservas de agua dulce y ningún gobierno.

La reunión se produce en medio de un reciente frenesí de informes mediáticos en torno al supuesto descubrimiento por parte de Rusia de enormes reservas de petróleo en la Antártida allá por 2020, cuando el buque de investigación polar ruso Alexander Karpinsky supuestamente descubrió unos 500 mil millones de barriles de petróleo crudo. La cuestión resurgió a principios de este mes en una sesión parlamentaria del Reino Unido donde los expertos advirtieron que los estudios geológicos de Rusia podrían poner en peligro la prohibición de décadas de la minería en la región.

Los informes sacudieron a Chile y Argentina, entre los siete países que reclaman soberanía sobre partes del continente desmilitarizado. Los estudios de Rusia se llevaron a cabo en el Mar de Weddell, donde los reclamos territoriales de Chile se superponen con los de Gran Bretaña y Argentina, según documentos presentados al parlamento británico.

“Vamos a seguir defendiendo lo que creemos que es justo”, dijo Francisco Undurraga, jefe del comité de defensa de Chile, condenando las “astutas aspiraciones” de las naciones que se apresuran a ejercer una mayor influencia sobre la Antártida en un mundo cada vez más hambriento de energía.

Cuando a principios de este mes surgieron informes sobre proyectos rusos de extracción de recursos, Argentina exigió saber si Rusia tenía intenciones científicas o económicas. El presidente chileno, Gabriel Boric, prometió “oponerse firmemente a cualquier explotación comercial de minerales e hidrocarburos”.

También han resurgido tensiones históricas sobre reclamos antárticos entre el gobierno de izquierda de Boric y el gobierno de extrema derecha de Argentina.

En un esfuerzo por remodelar la política exterior de Argentina en línea con los Estados Unidos, el presidente argentino Javier Milei anunció el mes pasado la construcción de una base naval en el sur con la participación de Estados Unidos para ayudar a Argentina a reclamar la Antártida, lo que generó quejas del Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile.

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La competencia geopolítica es sólo la última cuestión que ha puesto a prueba el Tratado Antártico de 53 naciones, que en 1959 consagró el territorio como una reserva científica utilizada sólo con fines pacíficos.

El aumento del nivel del mar debido al cambio climático, el turismo no regulado y la pesca de krill en el Océano Austral son sólo algunos otros desafíos que el sistema basado en el consenso está luchando por abordar.